El mes de agosto ha llegado sobrepasado de calor, y por estas tierras manchegas el sol es abrasador, menos mal que imaginarme un "fondo marino", tema que ha elegido nuestra querida amiga Lola de El Refugio de Lirtea, refresca un poco mi mente.
Como cada verano que paso las vacaciones en el pueblo, mi madre me manda ordenar ciertos cajones donde va acumulando cosas, esas lástimas que da pena tirar, y que según ella no sirven para nada, pero como sabe que intento aprovechar las cosas, me las va guardando.
Resulta que tenía este pastillero en forma de concha, imagino que regalo de alguna boda, no sé. La cuestión es que cuando lo vi, pensé que ya podría participar en el reto de este mes.
Después de limpiarlo, la verdad es que quedó brillante y reluciente, aún así, decidí probar con el decoupage y darle otro toque.
Primero le dí una capa de imprimación, con pintura blanca a la tiza en el interior de la ostra o concha, me he traído lo imprescindible y no dispongo de mucho material. Después, la he pintado con azul acrílico, y, una vez seco, he usado el craquelador de un paso.
Al mismo tiempo, con decoupage invertido, he decorado un pequeño platito haciendo juego y usando los motivos de la misma servilleta.
Para el exterior, solo la he pintado con pintura blanca a la tiza y he pegado el motivo adecuado, sin hacer craquelado ni nada.
Puedo guardar en este pastillero, reconvertido en un pequeño joyero, mis pendientes de perlas, que por cierto, tengo unos cuantos de varios tamaños.
Y este es el conjunto con el que participo en el Reto Mensual Bloguero que organiza Lola. Sólo queda pasarnos por El Refugio de Lirtea para bucear en el fondo del mar, con la esperanza de encontrar un poco de fresquito.